El camino de cada graduado universitario cuenta una historia. Para los estudiantes de primera generación, esa historia a menudo incluye obligaciones familiares, trabajar en varios empleos y trazar un camino desconocido a través de la educación superior. Los estudiantes universitarios de primera generación tienen más probabilidades de provenir de entornos de bajos ingresos o pertenecientes a minorías y de ser padres, veteranos o estadounidenses de primera generación. En la actualidad, 56% de estudiantes de pregrado En Estados Unidos son los primeros en sus familias en asistir a la universidad.
Dos profesoras de la Facultad de Salud de la Población de la Universidad de Nuevo México, Claudia Pratesi, PhD y Tammy Thomas, PhD, contribuyen a la manera en que las universidades apoyan a estos estudiantes. Como parte de su investigación a través de una beca del Proyecto de Experiencia Estudiantil, ambas profesoras se centran en comprender las experiencias de los estudiantes de primera generación.
Los profesores llevaron a cabo cinco grupos de discusión compuestos por estudiantes voluntarios de la Facultad de Salud de la Población, para recabar sus perspectivas sobre las experiencias de primera generación en la UNM. Tres grupos estaban compuestos por estudiantes de grado, mientras que dos incluían estudiantes de posgrado. Estas sesiones permitieron a los estudiantes compartir sus pensamientos sobre la vida académica, el apoyo social y los recursos institucionales. Las respuestas de los grupos de discusión revelaron cómo los estudiantes de primera generación enfrentan los desafíos institucionales y plantearon inquietudes exclusivas de su experiencia universitaria.
Pratesi y Thomas destacan la importancia de reconocer y aprovechar las fortalezas inherentes de estos estudiantes en sus actividades académicas. Durante sus grupos de discusión, exploraron el sentido de pertenencia de los estudiantes en el aula y en la universidad, evaluando cómo el hecho de ser un estudiante de primera generación influye en la salud mental, las experiencias académicas y la persistencia en la educación.
Su investigación reveló perspectivas personales sobre las experiencias de los estudiantes. Muchos estudiantes de primera generación tienen roles de cuidadores familiares, lo que requiere un equilibrio estratégico entre los objetivos académicos y las responsabilidades familiares. Este doble rol afecta tanto los recursos financieros como la gestión del tiempo. Los estudiantes a menudo se encuentran lidiando con estas responsabilidades sin la guía de miembros de la familia que comprendan el sistema universitario por experiencia previa, lo que genera desafíos con el apoyo social y la transición a la vida universitaria.
Un hallazgo clave es que los estudiantes necesitan un apoyo sustancial antes de ingresar a la vida universitaria. Muchos estudiantes de primera generación tienen dificultades para comprender sistemas complejos como la ayuda financiera, los requisitos de créditos y el papel de los asesores académicos. Los estudiantes de posgrado compartieron que, como estudiantes de pregrado, carecían de información clara sobre las expectativas académicas, lo que afectó su capacidad para involucrarse plenamente con sus estudios desde el principio.
Para Thomas, este trabajo tiene un significado personal. "Este es un tema importante para mí porque soy la primera de mi generación en ir a la universidad", comparte, aportando su experiencia personal a su investigación.
Pratesi y Thomas están desarrollando recomendaciones integrales de políticas y procedimientos para la Facultad en relación con los estudiantes de primera generación. Sus recomendaciones incluyen establecer programas de tutoría entre pares, organizar reuniones de primera generación y crear mejores sistemas para conectar a los estudiantes con oportunidades de financiación y becas. Estas recomendaciones se desarrollaron en conjunto con los comentarios de los estudiantes. Este importante recurso se compartirá en toda la red de la UNM y se utilizará en colaboración con el centro de recursos para la primera generación. Su trabajo destaca la necesidad de actividades de enriquecimiento y sistemas de apoyo que reconozcan las diversas necesidades y experiencias de los estudiantes.
Los resultados de la investigación se presentarán a Pamela Cheek, PhD, vicerrectora asociada para el éxito estudiantil, para su consideración en la Oficina del rector. Los profesores planean compartir sus resultados en conferencias académicas y buscar su publicación en revistas académicas. Su objetivo es claro: comprender las experiencias, necesidades, fortalezas y recomendaciones de los estudiantes para mejorar los sistemas y apoyos de la Universidad.
Ambos educadores siguen dedicados a comprender y mejorar la experiencia de los estudiantes de primera generación. Su trabajo en la Facultad de Salud de la Población tiene como objetivo desarrollar nuevos enfoques educativos que garanticen el éxito de los estudiantes, los vinculen con los recursos del campus y de la comunidad y creen políticas que los ayuden a prosperar. A través de su investigación en la UNM, Pratesi y Thomas están ayudando a crear un entorno académico más inclusivo y de apoyo que reconozca y aproveche las diversas experiencias de los estudiantes de primera generación.